A menudo, uno tiene la sensación de que repite una y otra vez las mismas historias y es que las situaciones difíciles se crean con actitudes y hábitos equivocados que se han acumulado a través del tiempo. A nosotros nos toca corregir estos errores para poder resolver las dificultades. En un acto impulsivo tendemos a querer cambiar la situación luchando contra ella y nos resistimos ciegamente y la rechazamos y desafiamos al destino como “un ciego o un cojo”. Nos auto compadecemos pensando en nuestra mala suerte y nos invade una sensación de impaciencia por cambiar ese destino al que pensamos estamos condenados y entonces nos cegamos y miramos las circunstancias exteriores como líneas de guía para actuar….. Es importante que nos concentremos en encontrar los egoísmos y los errores que nos condujeron a esas dificultades….Debemos ser modestos y humildes y dejar de preguntarnos continuamente ¿Porqué, porqué…..?
“Debemos resignarnos al desarrollo lento, paciente para invertir las tendencias que se han establecido. Intentar superarlas todas al mismo tiempo es temerario; la situación mejorará sólo en la medida en que mejoremos de una manera duradera”. I Ching
